HUICHOLES DE NAYARIT

Los wixárikas, o huicholes como son conocidos en español, habitan en el oeste central del país, principalmente en los estados de Nayarit, Jalisco, Durango y Zacatecas. Las viviendas de los huicholes usualmente son hechas de adobe o de piedras recubiertas con lodo. Junto a las casas tienen pequeños templos dedicados a las deidades y las llaman ririki o "casas de Dios."

Los productos artesanales que produce el pueblo Huichol pueden ser para vender o para uso religioso. Los cuadros de estambre que elaboran sobre tablas de madera con cera y sus figuras con chaquira sobre bules son para el comercio, mientras que los instrumentos musicales y bordados de ropa son para uso religioso.

El "ojo de Dios" es una figura instrumental religiosa de los Huicholes. La forma del "ojo de Dios" hace referencia a los cinco puntos cardinales (Norte, Sur, Este, Oeste y el centro.) Un "Ojo de Dios" equivale a un año en la vida de un niño y cada año su padre debe elaborar uno hasta que cumpla cinco años de edad, para que siempre esté protegido. Estos amuletos integran forman el "árbol cósmico" que se tira al mar en un lugar sagrado en San Blas, Nayarit.

Las cuatro deidades más importantes de su religión son el Maiz, Ciervo, Aguila y el Peyote. Las cuatro descienden del "Tau" o el Sol. El monte llamado Wirikuta que se ubica en el estado de San Luis Potosí es un lugar religioso para los Huicholes. El maíz representa el sustento vital mientras que el peyote es el medio más importante para trascender el mundo profano. Entre las fiestas religiosas más importantes de su sociedad esta la fiesta de las primeras mazorcas donde el cháman relata un viaje a la tierra sagrada de Wirikuta. Este viaje es llevado acabo en la temporada de sequía y su objetivo es recolectar peyote para sus ceremonias religiosas hasta llegar a la tierra del peyote, donde moran los dioses.